Histórica caminata del pueblo de Dios; unidos la iglesia Católica y Evangélica de Honduras en favor de la paz y la democracia

En diversas ciudades del país la convocatoria fue respaldada por la feligresía.  En la capital el trayecto a recorrer fue desde la Plaza Las Banderas, frente a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, hasta el Estadio Nacional José de la Paz Herrera.

Tegucigalpa. Un mensaje basado en las Santas Escrituras, bajo el testimonio de un Dios de amor, de paz y armonía, prevaleció en la caminata convocada por la iglesia Católica y Evangélica de Honduras en diversas ciudades del país.  

La respuesta de la feligresía en favor de la paz y la democracia se pudo palpar en las ciudades; Santa Rosa de Copán, Roatán, Juticalpa, Choluteca, La Ceiba, Gracias, Comayagua, El Progreso, Tegucigalpa, Danlí,  San Pedro Sula, Puerto Cortés, La Esperanza, Siguatepeque, entre otras.

José Vicente Nácher Tatay, arzobispo de Tegucigalpa, inicio su mensaje al final de la jornada mencionando la lectura bíblica de Isaías 52,7 que reza “Qué hermosos son sobres los montes los pies del mensajero que trae buenas noticias de paz y salvación”.

Agregó que como un eco del profeta Isaías, el pueblo de Honduras expresó a través del recorrido que no hay nadie que no quiera “la paz que  brota de la justicia” (Is 32, 17).

“Hoy en muchas ciudades de nuestra patria y más allá de nuestras fronteras, hemos caminado juntos movidos por la fe en Jesucristo y por un sincero amor a Honduras. Esa ha sido siempre la recta intención de esta caminata. Con este acto pacífico y pacificador queremos dar un mensaje de Esperanza a todos los hondureños”, expresó el máximo jerarca de la Iglesia Católica de Honduras.

A su vez agradeció a todos los que, de forma visible o silenciosa, se unieron con su presencia o con su oración.

Recalcó también como Honduras el mundo ha logrado apreciar que sí es posible caminar juntos (iglesia Católica y Evangélica). “La diversidad en la libertad nos enriquece mutuamente”.

Proceso democrático

Invitó  a todos los ciudadanos con derecho a votar, a que el 30 de noviembre de este 2025, ejerzan con respeto, responsabilidad e ilusión su derecho al voto. “Cada quién, en su conciencia, que opte”.

“Lo reiteramos, es necesaria y es posible una Honduras en la que se viva la verdad, la justicia, la libertad, la honestidad y la equidad”, dijo el presidente de la Conferencia Episcopal de Honduras.

Aconsejó a todos los aspirantes a cargos públicos a establecer momentos de encuentro y diálogo abierto, en busca del bien común que tanto anhelan los hondureños.

“Más aún, les sugerimos que expresen públicamente cuáles son los valores que les inspiran, como un nuevo acto de transparencia e información”, agregó.

Para concluir mencionó que entre los -caminantes- hubo diversidad de personas unidas por los valores del Evangelio de Jesucristo. “Que, a partir de nuestro ejemplo, -como mensajeros de la paz-, estos valores de mutuo reconocimiento y honorabilidad se difundan a todos los rincones de la patria”.

Luego con voz fortalecida en la fuerza de los presentes lanzó el ¡Viva Honduras. Viva Jesucristo!.

Oración permanente

Por su parte, Gerardo Irías, presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, en un acto de fe pidió a los asistentes hacer un acto de reverencia ante el Dios que todos honran “Señor pedimos por Honduras, que haya una política limpia. Somos un ejército dispuesto a orar por un país de paz”.

Mencionó que todos los cristianos están dispuestos a darlo todo por amor a Dios. “Este ha sido un día histórico, la misericordia de Dios está aquí”.

La invitación para el pueblo de fe es a continuar con la oración en favor de la cobertura de Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo.